Si algo hemos aprendido en 2022 es que la logística del frío debe ser competitiva (flexible, sostenible y asequible) para sobrevivir.
Si algo hemos aprendido en 2022 es que la logística del frío debe ser competitiva (flexible, sostenible y asequible) para sobrevivir.
Los patrones de consumo de productos perecederos varían de forma estacional, y la Navidad es la mejor prueba, con un perfil muy definido.